Publicado el miércoles, 26 de abril de 2017 por Laura Marchesani
Desde el momento en que se hace necesario acudir a otro país para llevar a cabo un ciclo de reproducción asistida es inevitable que surjan dudas. El hecho de tener que dirigirse a una clínica en el extranjero hace la situación más complicada. Normalmente, gracias a la experiencia acumulada, los centros que atienden a pacientes de otros países están preparados de manera adecuada para asistirles eficazmente, previniendo posibles inconvenientes y ofreciendo un soporte a la medida de sus exigencias.
En la fase en la que los futuros padres buscan información que les ayude a decidir sobre el camino adecuado para su situación y recopilan todos los datos que les permitan elegir de manera informada, Internet se convierte en una fuente a la que se puede recurrir de modo fácil e inmediato. Por desgracia, la Red no siempre provee la visión especializada y específica que se requiere. La cantidad de información que se encuentra 'on-line' es inabarcable y, a menudo, refleja experiencias personales que no se pueden generalizar o detalles que, desde el punto de vista médico, no son rigurosos. A pesar de que la Red ofrece una gran ayuda a la que recurrimos prácticamente a diario, hay que tener en cuenta que es un recurso que tiene ciertas limitaciones.
Leer las experiencias de reproducción asistida de los demás puede ser de ayuda para tener una visión más amplia sobre el asunto, pero al tratarse de cuestiones médicas sería oportuno afrontarlas con el rigor que la Red no puede proporcionar.
Cada caso, cada experiencia particular, refleja una situación personal, debido a que cada paciente tiene sus propias circunstancias y características, y porque las mismas clínicas de reproducción asistida, así como los médicos que las componen, siguen protocolos diseñados a su medida que se basan en la investigación y en la experiencia acumulada.
Una de las preguntas que más se plantean los pacientes se refiere a la congelación de la muestra de semen.
La respuesta no es ni única ni inequívoca. La forma de saber con seguridad cuál es la mejor opción para nosotros es hablar de ello con un médico especializado en reproducción asistida.
En general se tiende a usar muestras de semen previamente congeladas pero, como decimos, siempre se aconseja una valoración médica específica ya que los resultados dependen de las condiciones del semen e, incluso, del protocolo de la clínica. Por esta última razón, siempre se debería hablar del asunto directamente con el centro de procreación asistida elegido antes de decidir qué modalidad considerar.
Sólo el personal de la clínica sabe cuáles son los protocolos que desde su experiencia, en base a la tecnología disponible y teniendo en cuenta las diferentes situaciones, ofrecen mejores posibilidades de éxito.
Incluso la distancia y la logística tienen un peso en la valoración. Planear dejar la muestra de semen en el momento de la punción ovárica requiere una organización milimétrica. En ocasiones, sobre todo en el caso de pacientes que vienen lejos, se deben tener en cuenta factores que no se pueden controlar, como posibles retrasos de vuelos o cancelaciones. Si el médico considera que el semen es válido para una fecundación 'in vitro', en estos casos se aconseja la congelación previa. No obstante, tan sólo el médico de reproducción asistida puede dar las indicaciones específicas.
